dilluns, 11 d’octubre del 2010

This is Ireland!

Pasado un mes desde que llegué (bueno, ayer, pero era domingo y en un país cristiano como este no se trabaja) es el momento de hacer balance de lo que me he ido encontrando. De típicos y tópicos que hay que desmentir y de cosas que añadir a la idea colectiva de Dublín.
Para empezar, algo que me cabrea: ¡no llueve tanto como nos quieren hacer creer! Hace sol y hasta calor... De hecho en este momento voy en tirantes... :S Tampoco hay leprechauns, ni campos de tréboles, ni viejos pelirojos regordetes fumando en pipa sentados en un barril, pero creo que para eso debería ir a una Hemp Shop y comprar magic mushrooms, que son legales (de hecho alguien me contó que cualquier droga es legal si la adulteras lo suficiente como para que técnicamente deje de ser esa droga... :S).
Sigamos para bingo...
¿Qué coño les pasa a los Irish con la sal? Quiero sal, no iodina, ni sal pasada por el turmix ocho veces. Lo que me ha costado encontrar algo tan básico como la sal gorda! (Y no quiero comentar el tema queso, porque no es que me haya cosatado encontrar, sino que no hay nada más allá del cheddar, eso sí, tienen la misma variedad de cheddar que de patatas: 82765942176598713265). Sin salir del super pasamos a la carne, podría entender que un chuletón de 4kg estuviese alarmado, pero ¿el puto pollo? Tres pechugas de nada y van y las alarman. Y realmente es algo que me intriga, porque para otras cosas son lo más confiado del mundo: subes al bus y la gente deja las mochilas en el espacio para maletas, aunque luego suban al piso de arriba y no puedan controlarlas... Pero bueno, los autobuses son un mundo aparte, a Brave New World que dirían Aldous Huxley o Iron Maiden. Ya comenté mi teoría sobre el origen de tanta fe religiosa y su relación con los autobuses, pero es que es increíble. Esta mañana he visto a una señora autobusera prácticamente derrapando en la esquina de mi casa, y creo que he sido la única en flipar. Y a modo de punto freak: puedes alquilar los buses urbanos. Lo lógico es hacerlo para despedidas de soltero, bodas, fiestas, etc. pero hoy he visto uno que estaba siendo usado de restaurante (os pasaría la foto, pero el viernes pasado la perdí entre pub y pub :S).
Y hablando de pubs. Lo peor que puedes hacer con tu vida si eres un ente solitario y aislado es ir a un pub a beber solo en un rincón de la barra. No importa la ubicación del pub, no importa la hora a la que vayas, siempre hay gente tomando algo que va a venir a contarte algo (dependiendo del día y la hora la conversación variará, pero existir, existirá). Puede que a nadie le importe tu historia, pero tampoco le importa escucharte. A veces sólo buscamos el contacto humano, hablar, sentir que formamos parte de algo, que existimos. Y eso es igual en cualquier lugar del mundo, incluso en Irlanda, donde parece que nunca te vayas a sentir solo.

Edito: AMO a los Irish y a su buen hacer (el de uno, como mínimo). He ido al último pub en el que estuve el viernes a preguntar si habían encontrado mi cámara y en este momento la tengo en mis manos :) Soy taaaaaan feliz!

2 comentaris:

  1. ho immaginato adesso tu dentro un pub, che chiedi una birra e racconti ad un vecchio signore che non puoi trovare del sale... ma non del sale normale.. hehehe
    la cosa dela pioggia, immagino che sia la grande aspettativa della gente in che piova tutto il puto giorno e alla fine è impossibile che cada tanta acqua dal cielo quanto immaginato...
    mi è piaciuto il tuo blog albachiara.. hehehe
    baci

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  2. ...che non posso trovare delLA sale! Non sai che dopo un anno non abbiamo imparato che «sale» è maschile? xD

    Ci vediamo fra poco bella!!

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